El mundo de hoy es uno globalizado, y eso no escapa la exposición a los idiomas. Cada vez es más común encontrar matrimonios con padres con diferentes idiomas nativos, viviendo en un tercer país con un tercer y hasta cuarto idioma local. Todos tienen una pregunta en común: ¿Cuántos idiomas debería aprender mi hijo?

Y es que la inmigración, los estudios en el exterior y las ofertas de trabajo en un mundo con cada vez menos fronteras son solo algunas de las razones que hacen que las familias de hoy en día se creen en ambientes multiculturales, y el idioma no escapa esta regla.

Leemos en las noticias que en pleno siglo XXI muchos niños en Europa están aprendiendo hasta cuatro idiomas, sin mayores dificultades. ¿Pero cuál es el costo? ¿Se requiere algún poder sobrenatural para enseñarles? ¿Hay algún número tope con el cual ya sea “demasiado” para los pequeños? ¿A qué idioma darle prioridad? ¿Será que mejor deben dominar bien un idioma antes de introducir otros? ¿Qué herramientas usar?

Nosotros también nos hicimos estas preguntas y, para ayudarte a responderlas, queremos contarte un poco sobre lo que investigamos. Por esto te recomendamos visitar estos 3 sitios web:

Multilingual Parenting

El primer sitio web que te recomendamos visitar es MultilingualParenting. Aquí descubrimos varios datos interesantes. Aprendimos que el 30% de las horas en el que un niño está despierto o activo deben ser invertidas en el idioma que se va a enseñar para poder obtener fluidez en el habla. Basándonos en esta regla, estaríamos hablando de un tope de tres idiomas en los que se podría aspirar a fluidez conversacional. Sin embargo hacen la aclaratoria de que ir añadiendo poco a poco un idioma adicional no hace ningún daño. Por el contrario, puede ser extremadamente beneficioso estar expuesto a ese cuarto idioma adicional en los primeros años de vida, lo que facilitará el aprendizaje del mismo en edades adultas.

Explican la diferencia entre fluidez conversacional y habilidades académicas. Añaden que para obtener habilidades académicas, incluida la escritura, puede requerir años adicionales de estudio y preparación. Ello por supuesto dependerá en gran medida de la combinación de idiomas que se esté aprendiendo. No es lo mismo un niño aprendiendo distintas lenguas de habla germánica, por ejemplo, que aprender lenguas germánicas, latinas y mandarín o hebreo.

Aclaran también que existen casos excepcionales de niños que manejan hasta 7 idiomas con fluidez, pero que definitivamente no es lo que puede esperarse de una familia estándar.

Esta página está llena de consejos y noticias de interés para la paternidad en ambientes donde se hablen varios idiomas.

Bilingual Kidspot

Bilingual Kidspot es un sitio web también dedicado a la crianza de niños bilingües o políglotas. Entre sus secciones está “bilingual parenting” (paternidad bilingue), “expert advice” (consejos de expertos) y “languages resources” (recursos de lenguaje)

Ellos son de la opinión de que la respuesta a las interrogantes antes planteadas no son tan fáciles de responder. Lo que sí aseguran es que las ventajas para los niños bilingües son infinitas. 

Aclaran que las distintas combinaciones de idiomas, ubicaciones y circunstancias hacen que ninguna familia sea igual a la otra. Indican que la cantidad de idiomas que tu hijo pueda aprender depende esencialmente de estos factores: 1. Los idiomas que hablen los padres. 2. Si ambos padres manejan el idioma local. 3. Si los padres, a su vez, saben hablar varios idiomas.

Por último advierten sobre los riesgos de exposición a demasiados idiomas, lo que puede traducirse en que el niño no logre adquirir fluidez en ninguno. ¡El artículo está súper interesante!

The Bilingual Advantage

En The Bilingual Advantage comienzan explicando que criar a un niño en un ambiente bilingüe es bueno, pero que hacerlo en un ambiente multilingue ¡es mucho mejor! Reseñan que según Laura-Ann Petito, profesora de psicología en la Universidad de Toronto,

El cerebro no está preparado biológicamente para aprender un solo idioma” Podemos aprender tantos idiomas como queramos. En una entrevista en TVO Laura-Ann Petito explica que la clave es empezar pronto cuando el niño está todavía en la fase de adquisición de la primera lengua, ya que utilizará el mismo “tejido cerebral” para todas las lenguas que está aprendiendo. Más tarde, por supuesto, todavía es posible, pero diferentes partes del cerebro estarán involucradas, lo que hará más difícil el proceso de aprendizaje del idioma.

Puedes leer aquí el resto de este interesante artículo

Como verán, no hay una única respuesta a esta interrogante pero vemos que los expertos apuntan hacia una idea común.

¡Nos encantará escuchar tu experiencia y consejos si vienes o estás formando una familia multilingüe!

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